jueves, 3 de octubre de 2013

No es odio, ni es perdón


No es odio, es gratitud
El peor ser humano en la faz de la tierra, tiene tu nombre
Que mis ojos ya no te vean
Que mi piel ya no te sienta
Que mis oídos ya no se traguen tu veneno
No es odio, es bendición
Por los años de ultraje intencionado
Por los días de heridas congeladas
Por las bastantes mentiras dichas por minuto
Por todo eso se quemará tu insensatez
Se quemará tu apatía
Se quemará esa insensibilidad tan tuya
Se devolverá la carcajada
Renacerá la amargura que ya habita en tu alma
Y el fruto de amargura será duda e incomprensión
y tu alma se rodeará de un frío tan frío que comenzarás a saber lo que es sentir
No es odio, es gratitud
Gratitud al olvido
Gratitud a que tu vacío ya no llena mi vacío
Porque mi vacío no era humano, era divino
Un vacío que ya ha encontrado las respuestas y la gratitud suprema
Eres el reflejo del malvado promedio de esta tierra
Porque tú te has alimentado de maldad
Al igual que todos los malignos de esta tierra
Porque el peor ser humano en la faz de la tierra, tiene tu nombre
Tu sombra y tu reflejo son el fiel representante de todos aquellos que llevan tu nombre
No es odio
ha sido despertar
ha sido bendición
ha sido gratitud.